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Por más de 17 años, la máquina extintora de incendios del
Cuerpo de Bomberos del corregimiento de Caimalito, estuvo al servicio de la
comunidad, hoy yace quieta en el comando, a la espera de su traslado a la
ciudad de Pereira.
El vehículo modelo 50 y con capacidad para 450 galones de
agua, ayudó al equipo de Bomberos pereiranos a extinguir más de un incendio y
salvar más de una vida, sin embargo ya ha llegado su retiro, y hoy su único fin
será el de exhibición de carros antiguos que se hace de manera anual en la
Perla del Otún.
Aunque aún funciona a la perfección, su tamaño se ha vuelto poco práctico para el
Cuerpo de Bomberos a la hora de llegar a los lugares más difíciles de la zona,
por lo que hace algunos años fue reemplazada por otro vehículo.
“Está más buena que la máquina nueva, incluso se daña más la
nueva que la vieja, sin embargo no cabe en todos los sectores”, manifiesta un
miembro de este equipo de héroes.
Esta máquina de Bomberos, fue un regalo que le dio la
Alcaldía de Pereira para 1997 al Cuerpo de Bomberos del corregimiento, después
de que este vehículo terminara incinerado en el municipio de Guática.
Según los mismos bomberos, al comando llegó sin motor, sin
embargo el Comandante Guillermo Montes, quien además de héroe y fundador del
Cuerpo de Bomberos de Caimalito, era mecánico, terminó arreglándola de la mano
de otros voluntarios.
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