UTP: nadie
entabla diálogo
A tres
semanas del declarado cese de actividades académicas de los estudiantes, el
balance es más que desalentador: el campus permanece desierto y lo único
evidente es una constante guerra de comunicados entre las partes en conflicto.
Profesores de ASPU convocaron a rueda de prensa.
El
rector acusa el cese como de “ilegal”, los estudiantes dicen que el paro
continuará hasta que el rector se vaya y los profesores, aunque no piden la
renuncia del rector, sí se han manifestado en contra de sus cuatro reelecciones
y lo que ellos denominan como “secuestro de la democracia en los procesos
electorales que se dan en la UTP”.
Esas
posturas fueron evidentes en el encuentro con algunos pocos medios que
asistieron a una rueda de prensa. De hecho, esta situación fue manifestada por
los mismos convocantes, quienes lamentaron “el desinterés por parte de los
medios, o quién sabe por cual otra cosa”.
A este
respecto, también se hicieron reparos puntuales al periódico La Tarde, medio
que según las directivas de ASPU allí presentes, “es manejado como gerente y
director por Juan Guillermo Ángel, integrante a su vez del Consejo Superior de
la UTP, y quien ha tenido un cubrimiento desequilibrado” de la anormalidad
académica. También hicieron mención a una emisora nacional que planteó esta
situación como una pelea de poder entre hermanos. Al respecto, Gonzalo Arango,
hermano del rector, manifestó enfático: “no he aspirado ni aspiraré a la
rectoría de la UTP”.
Por
parte de los docentes se encontraban Luis José Rueda, representante profesoral
ante el Consejo Superior; León Felipe Cubillos y William Rendón, miembros de la
junta directiva de ASPU, y Gonzalo Arango, director ejecutivo de ASPU.
Para el
mediodía de hoy se propuso una jornada de picnic en la Plaza de Bolívar, con el
fin de transmitir a la ciudadanía pereirana los reparos del cuerpo profesoral,
los cuales se resumen en tres puntos: el retorno a la democracia en la UTP, una
actuación ética y dignidad como un valor esencial e intransferible de todo ser
humano.
Enfatizaron
los docentes que en la UTP no se piensa en comunidad académica, sino en el
concepto de universidad-empresa, lo que va en desmedro de la calidad,
enfatizando en el crecimiento de la cantidad de matriculados (17.000
estudiantes a hoy), pero sin tener los recursos presupuestales adecuados, ni la
infraestructura exigida.
CONTRATACIÓN
Además
de los reparos al cambio de reglas, la necesidad de que el vicerrector
académico se retire del Comité para la asignación de puntos para poder investigar
irregularidades en las cuales él mismo está comprometido, la grave injerencia
de cierto grupo político en los destinos de la universidad y las
irregularidades de Alma Mater, los representantes docentes manifestaron su
inquietud por lo que denominaron “precariedad laboral en la universidad”.
Así,
manifestaron que el 80 por ciento de los docentes son temporales. Siendo más
específicos, entregaron las siguientes cifras:
- Docentes de planta: 305
- Docentes transitorios de medio tiempo y tiempo completo: 150
- Catedráticos y transitorios por horas: 850
Según
manifestaron, la figura del catedrático nació como la necesidad de recurrir a
personas con saberes muy específicos y de alto valor, pero que estaban
dedicadas a otras labores profesionales; “pero en la actualidad se contratan
catedráticos sin ningún tipo de selección, en desmedro de la calidad”. Además,
algunos catedráticos, tienen más de 20 horas de asignación semanal, lo cual
contradice los estatutos de la misma universidad.
Por
último, hicieron referencia a ASDOUTP, nacida en enero del 2012, como una
agremiación docente paralela cercana a las directivas de la universidad y
varios de cuyos miembros “resultaron favorecidos en los recientes concursos
para contratación de profesores de planta”, manifestaron.
Por
último, recalcaron que en la UTP predominan los amiguismos y los pagos de
favores como estrategia para crear simpatizantes y apoyo entre la comunidad
académica por parte de las directivas.
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