En lo corrido del mes de marzo
han sido envenenados cuatro perros y dos gatos en el barrio El Bosque. Los vecinos
han manifestado su indignación al respecto y han hecho pública la denuncia. Sin
embargo, algunos aseguran que, aunque no está bien envenenar a los animales, el
descuido de los dueños de estos se ha convertido en una molestia para “toda le
gente”.
Los gatos y perros envenenados no
son callejeros, como podría pensarse, todos tenían dueño y fueron ellos
quienes, en primera instancia, manifestaron la indignación por el envenenamiento
de las mascotas. Ahora, en el barrio, hay avisos en las paredes que previenen a
los dueños de mascotas sobre “un asesino suelto”. Este es, evidentemente, un
acto de intolerancia que pasa desapercibido para las autoridades.
Algunos vecinos, que también se
oponen abiertamente al asesinato de las mascotas, expresaron que esto se debe
al descuido “de los dueños de esos
animales”. Daños en jardines, mordeduras a niños y excrementos en calles y
andenes son algunos de los motivos por los cuales los vecinos dicen que “deben controlar a las mascotas”.
En días pasados, un grupo de personas
acudió a la Policía Ambiental para denunciar la problemática con las mascotas,
luego de visitar el barrio y hablar con algunos de sus habitantes la policía se
comprometió a “dar rondas de vez en
cuando”, pero nunca volvieron.
El problema provocado por la
irresponsabilidad en el manejo de los excrementos de las mascotas y el cuidado
de las mismas, no es un problema exclusivo del barrio El Bosque, es un tema que
suena en varios puntos de la Comuna Universidad y que, penosamente, ha pasado
los límites de lo aceptable en actos de extrema intolerancia como el
envenenamiento de las mascotas.
Quienes denuncian el asesinato de
las mascotas han lanzado un mensaje preventivo a otros dueños de mascotas para
que las cuiden y denuncien cualquier información que permita dar con quien o
quienes están envenenando a los animales.
también en la vereda la bamba, después de la vereda el cogolo, por la nueva variante condina, en la vía pereira-armenia; han matado perros y gatos, muchos. la gente no tiene donde acudir. simplemente lloran sus mascotas envenenadas. se presume de los tomateros, sembradores de tomate obligados a usar pesticidas en sus sembríos, pero que aparentemente lo usan indiscriminadamente, dejando restos y desperdicios contaminados, que luego las mascotas comen y mueren, de manera muy dolorosa. yo soy nueva en el área, tampoco tengo conocimiento de como redireccionar las denuncias de los moradores de estas veredas, si alguien sabe cómo, por favor indicarlo. es muy cruel y maravillosa también, la vida en estas veredas, olvidadas de todos y de todo.
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