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La
mayoría de comerciantes aseguran haber perdido
más de la mitad de su clientela
y debido a ello incluso
han tenido que despedir personal
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A casi dos meses de haber entrado en vigencia el decreto 187 mediante
el cual se regula el horario de funcionamiento de los establecimientos
dedicados a la venta o consumo de licor, un total de 11 comerciantes ya han
sido sancionados por la Policía Nacional.
Alrededor de 350 procesos
administrativos por infracción del horario de funcionamiento contra bares,
discotecas y estanquillos ubicados en diferentes zonas de la ciudad como Cuba,
Circunvalar, Centro, Poblado y Parque Industrial, abrió la Secretaría de
Gobierno, según la titular Beatriz Eugenia Ramírez.
“En un informe presentado por la
Policía Metropolitana de Pereira el pasado 30 de abril, nos mostraron cómo se
registraron más de dos mil llamadas en el mes inmediatamente anterior a la
expedición del decreto y 500 llamadas menos al 123 después de que este entrara
en vigencia”, manifestó.
La disminución en el número de
quejas también se dio en la Alcaldía de Pereira, donde se redujo el número de oficios
con relación al ruido, hecho que confirmó el director operativo de Control y
Vigilancia, John Alaf Peña, quien argumentó que si antes del decreto se
presentaban cinco denuncias diarias, ahora solo se registran tres o cuatro a la
semana.
Mientras algunos comerciantes ven sus ingresos caer a
causa de la nueva ley, la Secretaría de Gobierno manifiesta que hubo
tiempo suficiente para que se autorregularan. “La verdad es que este decreto
fue socializado con el comercio organizado, con los establecimientos en los
cuales se vende o consume licor, fueron dos años en los que el alcalde estuvo
llamándolos al autocontrol y debido a que las quejas continuaban reiteradamente
nos dimos a la tarea de construir este decreto”.
Tras la puesta en marcha del
nuevo decreto, las autoridades han venido realizando cada fin de semana
operativos de manera simultánea en toda la ciudad, algunos de ellos son solo
procesos pedagógicos en los que se hacen mediciones cortas en las que se
demuestra al propietario el nivel de ruido que emite su negocio y que es
detonante de la intranquilidad de los vecinos.
“Hemos venido haciendo operativos
durante todos los fines de semana en los que se hacen mediciones no formales,
en forma educativa, para que los comerciantes se den cuenta qué tan restrictivo
es el ruido y si no insonorizan, prácticamente tienen que funcionar con un
volumen cero, ya que solo el ruido que hacen las personas al hablar cuando el
establecimiento está lleno sube al tope máximo de decibeles que puede emitir
hacia afuera”, explicó Peña.
Concejo
El pasado 30 de abril el Decreto187
fue debatido en el Concejo de Pereira y las reacciones no se hicieron esperar.
Variados puntos de vistas se presentaron durante la sección en la que participaron
Secretaría de Gobierno, Asobares, veedurías ciudadanas, comerciantes de todos
los sectores, entre otros.
María Camila Rodríguez, directora ejecutiva de
Asobares, manifestó la importancia de incentivar con beneficios tributarios a
los comerciantes que están realizando grandes gastos para ceñirse a la ley.
"Los establecimientos comerciales han hecho un
gran esfuerzo para autorregularse; pero de todas maneras los precios para las
adecuaciones oscilan entre los 10 y 50 millones de pesos, cantidad que es
bastante elevada, ellos están saliendo afectados, pero también sienten un
compromiso", argumentó Rodríguez.
De otro lado, uno de los ediles invitó a las
autoridades a pensar más allá la normatividad argumentando que hay una debilidad
de origen que hace laxa a la misma ley
con respecto al uso del suelo, pues le permite a los comerciantes seguir con su
labor que no es propia de zonas residenciales.
El concejal Juan Carlos Reinales también criticó el
Decreto desde el punto de vista de la función de la policía. "El municipio
crea el decreto, pero la responsabilidad de que se cumpla es de la Policía, con
todo el respeto que merece la policía, esto puede llevar a señalamientos
subjetivos, y hasta de pronto a corrupción en la misma vigilancia"
El dato
De 700 establecimientos pereiranos
que expenden bebidas alcohólicas en horas nocturnas, a 350 ya les abrieron
procesos administrativos por ruido.
Destacado
“Fueron dos años en los que el
alcalde estuvo llamándolos al autocontrol y debido a que las quejas continuaban
reiteradamente nos dimos a la tarea de construir este decreto”.
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