Desde allí se observa una ciudad pequeña, silenciosa y distante de lo natural |
En lo alto de la montaña hay un pequeño lugar que con características
de mirador, deja entre ver una ciudad tranquila, una Pereira de ensueño.
Quienes tengan la intención de
alejarse del ruido, escaparse de lo cotidiano y rutinario puede encontrar en
el Alto del Nudo lugares cómodos para respirar naturaleza, para encontrarse consigo
mismo sin dejar a un lado a la ciudad.
Mirador del Voladero, un estadero
a la altura del cielo que invita a cualquiera que por allí pase a divisar lo
que en el trajín de la ciudad se ignora y se escapa a simple vista. El aeropuerto
diminuto, un Hernán Ramírez Villegas que parece una pequeña pelota desde la
lejanía; casas que parecen hormigas y sin duda lo más atractivo del lugar el
ambiente a montaña.
El camino desde su inicio ya huele
a rural, a campesinado; las viviendas muchas con la característica cafetera se
visten con su mejor atuendo para impresionar a cuanto curioso pase por allí.
El cielo, un cómplice cercano de tanta belleza. |
Así pues, en el norte de la
ciudad los pereiranos cuentan con una alternativa diferente de recreación, de
paseo de domingo, de salida en familia alterna a la piscina, al helado en el
centro comercial, o quizá a la ida a cine; pues allí desde lo alto, todo lo que
se puede ver parece a película.
El Alto del Nudo en todas sus condiciones de montaña está listo para recibirlo, módicos precios para disfrutar en familia, con amigos o si es el caso y la necesidad, estar solos con la naturaleza.
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