César Piedrahita abre su galería de arte en Pereira

Para algunos demasiado jóvenes el nombre de César Piedrahita es, tal vez, extraño. Seguramente han escuchado mencionar su nombre entre algunos intelectuales y artistas de la ciudad, incluso se han detenido un momento frente una de sus obras. Sin embargo, es difícil que alguien que desconozca el estado del arte de la ciudad en los últimos 20 años, retenga la figura de César Piedrahita.

No sucede lo mismo con quienes conocen y han crecido con el arte de la ciudad, si se le pregunta a alguien interesado en el arte y la cultura quién es César Piedrahita, posiblemente responderá “el pintor, claro que lo conozco ¿volvió?”.

César Piedrahita abre su galería en Pereira

Sí, volvió, por varios años César Piedrahita estuvo fuera del país. Durante este periodo, en el que sus apariciones en la escena del arte nacional y regional fueron menguando, él siguió trabajando paciente y disciplinado en una obra que hoy ve consolidada. “Venía perdido del ámbito cultural del país, estaba viviendo en Guatemala, en un cargo diplomático, pero  seguía trabajando día a día.  Regresé a Pereira hace algunos años y desde entonces me he dedicado a pintar, esta galería es el resultado de estos 4 años de trabajo”.

A pesar de los esfuerzos de varias instituciones públicas y privadas para apoyar la cultura, abrir una galería de arte en Pereira es casi una locura, no hay muchos testimonios de artistas que se sostengan con su obra y, menos, que lleven a buen término la aventura de abrir una galería en la que, además de su trabajo, se abra un espacio para la creación. Piedrahita lo hizo en una inesperada esquina de la calle 13 con carrera 14, el objetivo es “incentivar a la gente y a otros artistas, mostrarles que el arte sigue vivo, esta es una forma de afirmar que un artista es también un trabajador, tal vez como un ingeniero, un periodista, un médico. Somos profesionales en lo que hacemos. Todos tenemos un artista dormido que no despierta por miedo, la idea es que aquí despierte, que la gente venga a crear, que sean muy libres. Es una apuesta por la educación”.

Una obra que tiene a La Ciudad como tema

En la obra de Piedrahita es evidente la libertad de movimientos, fuertes pinceladas componen los cuadros cuyos espacios, antes vacíos, se cubren con manchas y texturas sin una forma preestablecida.

La ciudad es se revela como tema central, fragmentado, violento y nostálgico, con variados matices que expresan geografías y, sobre todo, emociones modernas. Cada cuadro emite la “idea de un caos que refleja la nostalgia de los pueblos de ayer, pero, a la vez, un homenaje a las ciudades de hoy”.

Una obra con objetivos claros, así lo deja ver el artista cuando expresa que su trabajo es “una mezcla de literatura con lo personal y lo social, y si bien es cierto que hay momentos en que se refleja una cierta <<violencia>> dentro del contexto general de la pintura, también es cierto que ella no se aparta del romanticismo y la sensibilidad que me inspira el hacer parte de esa magia inherente que llevan las ciudades”.

César Piedrahita, cuya obra ha sido expuesta de manera individual y colectiva en Nueva York y España, además de varios países de América Latina, abre su obra, su visión de ciudad, de mundo, en un momento en que las grandes ciudades ven caer sus economías y el mundo se abre a la interacción cultural.