martes, 17 de septiembre de 2013

Paro / Anormalidad

Graves denuncias en UTP

Estudiantes declararon cese de actividades desde la noche del jueves pasado. Piden renuncia del rector. Tráfico de puntos salariales y red de influencias, denuncian profesores.


La comunidad estudiantil argumenta que todo se debe a que desean proponer un mecanismo de elección democrático en el que puedan participar en la elección de un nuevo rector, ya que según ellos el modelo de gestión desarrollado a lo largo de los 14 años de dirección de Arango, se ha convertido en un sistema nocivo y autoritario en el que perdieron su voz y voto y esto ha llevado a que surjan otras necesidades de tipo colectivo e individual.

“Entramos en paro desde el jueves después de participar de una asamblea general de estudiantes en la que decidimos que como punto principal exigiremos la salida del rector y crearemos un pliego de peticiones para darle soluciones a varias problemáticas que han surgido a raíz de la dirección de Luis Enrique Arango”, expresó Luisa Fernanda Marín, estudiante.


En lo que va corrido de la semana los estudiantes a través de sus líderes de facultad han estado tratando de identificar las necesidades de cada programa para plasmar las mismas en el pliego que en próximos días será expuesto ante el consejo superior, este último encargado de elegir y posicionar los rectores de la universidad.

“Hay otros problemas en el tema de autonomía, por ejemplo: la elección de decanos variaron desde el 2008, y en el nuevo sistemas ya nos somos principales como comunidad académica, sino es el consejo superior quiten termina definiendo quien es el decano y no permite a la facultad autodefinirse”  argumentó Marín.


Entre las problemáticas ya planteadas y de la cual la vicerectoría no es ajena, es la del funcionamiento del Instituto de Lenguas, ya que los estudiantes alegan que tiene programado una intensidad horaria con la cual muchos no pueden cargar y que esto se ha convertido en un cuello de botella para los futuros profesionales.

Frente a esta situación el Vicerrector Académico William Ardila argumentó que lo que se pretende es crear un espacio para una segunda lengua al que los nuevos profesionales puedan acceder y convertirse en personas más competitivas en el campo laboral donde hoy ya es una exigencia.


Otra de las situaciones que está generando malestar es el tema de los bonos, “La universidad termina dando poco o nada para los bonos y estos son pocos, no impactan a la comunidad estudiantil, a veces son mal repartidos, muchos que no se lo merecen los tienen, otros que si deberían tenerlos no alcanzar a obtenerlos”, expresó Luisa Fernanda, quien aseguró con el pliego de cargos pretenden darle pronta solución a esta situación.

Frente a la situación Ardila expresó a este medio de comunicación que no es muy clara la situación y que están al pendiente del pliego de peticiones que será presentado al consejo superior de la universidad, por lo pronto esperan que el paro no se convierta en foco de disturbios.
“No sabemos el futuro, la idea es que no tengamos dificultades de orden público y podamos encontrar la salida a estos conflictos que los estudiantes plantean”.


El funcionario también argumentó que la situación que actualmente se vive en la universidad no solo afecta a la Tecnológica y sus docentes, sino también afecta a los mismos estudiantes, pues algunos de ellos dependen de préstamos, de las limitaciones presupuestales y de las mismas limitaciones que les ponen sus padres, por lo que espera que pronto se llegue a un feliz término.

Con respecto a la solicitud de la renuncia de Arango, el vicerrector expresó que es un tema muy personal para el rector, sin embargo argumentó que Arango es un hombre que va hasta el final y que no hay motivos para que este renuncie, “No está cuestionado, es un hombre con grandes capacidades intelectuales, es un absurdo que el piense en renunciar, a una persona le piden la renuncia porque es mediocre y esto para nada tiene que ver con el rector”.


Mientras tanto los estudiantes ya anunciaron que el límite del paso será hasta que Luis Enrique Arango salga de la rectoría, y este ya expresó frente a otros medios de comunicación que no renunciará pues está en su derecho constitucional.

Graves denuncias

William Ardila, Vicerrector Académico.
Anoche, luego de la entrevista concedida por el vicerrector académico William Ardila a VECINOS, se dieron a conocer denuncias por parte de Aspu – Risaralda, que agremia a los profesores universitarios, según las cuales Ardila habría obtenido una cantidad desmesurada de puntos como retribución a su producción académica. “Otro de los casos a destacar es el del Vicerrector Académico, William Ardila U, quien en 11 años, acumula trescientos cuarenta y seis coma cuatro (346,4) puntos obtenidos por figurar como coautor en setenta (70) publicaciones con treinta y cinco (35) profesores distintos (como coautores)”.

En el artículo publicado en el número 2 del periódico La Palabra, de esa agremiación, se afirma que cada punto representa un incremento salarial de 10.408 pesos.

Allí mismo se denuncia que otros más, cercanos al vicerrector y a la administración de la universidad, también se habrían beneficiado de manera irregular por este sistema de asignación de puntos que repercuten en la escala salarial. Así, se menciona el caso del director del departamento de matemáticas, Fernando Mesa, “quien entre los años 2005 a lo corrido de 2013, aparece como favorecido con la no despreciable suma de seiscientos cuarenta coma ocho (640,8), puntos
salariales (equivalente al puntaje máximo que se obtendría por la realización de ocho doctorados o por la publicación de 32 libros resultados de investigación), reconocidos por sesenta y ocho (68) trabajos producidos presuntamente en asocio con veinticuatro (24) autores diferentes y en diversos campos del conocimiento”.

El artículo denuncia que solo quienes estén cerca de la administración del rector Luis Enrique Arango pueden acceder a beneficios rápidos por puntos, según producción académica, pues los profesores del común deben seguir un proceso más dispendioso: “la evaluación de los trabajos presentados al CIARP por docentes que no gozan de los favores de quienes disfrutan del poder, se demoran tiempos que rayan con el absurdo y son sometidos a todo tipo de trabas para su reconocimiento”.

En el informe se muestran varios gráficos basados en información que, según dice allí, fue aportada por el CIARP (Comité Interno de Asignación y Reconocimiento), que depende de la vicerrectoría académica.


Vea la publicación completa aquí.


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