Ni los vecinos ni Don José tienen muy claro si fue la
empresa de energía o la alcaldía de Pereira quienes hicieron el arreglo, pero
aunque se solucionó el problema de las cuerdas que representaban un peligro, en
el proceso los operarios tumbaron el cable que le daba luz a las lámparas de
una parte del parque.
Ante la solicitud de los vecinos para que se hiciera la
reparación pertinente, según un habitante del sector, la empresa de energía
respondió que los vecinos deben comprar el cable para que se pueda hacer tal
arreglo.
El señor Calle asegura que la oscuridad en este sector del
parque representa un alto riesgo de seguridad en la noches, pues solo existe un
vigilante para todo el parque y este problema limita su labor obligándolo a
estar cerca del sector sin iluminación para poder cerciorarse ante la posible
presencia de extraños.
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