Es que fue así como empezó Huertas, una de las veredas más populares de Pereira, que sin ser solo un pedazo de tierra, rememora la historia de aquellos abuelos que crecieron a las afueras de la ciudad.
Ubicada kilómetro 2 vía Armenia, esta zona tiene tramos que son del completo olvido del gobierno, ni siquiera tienen gas domiciliario y la energía se va cada vez que llueve.
"Lo más maluco de vivir por acá es que con cualquier aguacero se va la energía y a veces se demora hasta 24 horas en llegar", dijo Malena Girlado, tendera de Huertas.
Sí de día parece un sitio alejado de la urbanidad, quizá de noche cuando se va la energía la distancia se hace más evidente. Los vecinos pierden total comunicación, se ven obligados acostarse a horas tempranas.
Huertas la vereda que nació con una invasión poco a poco toma forma, los años dirán si le alcanzará para ser corregimiento ya que después de 34 años de historia, no puede apenas parecerse a su vecino Tribunas.
"Después de todo hay que decir que es un sector muy sano, no hay drogadicción, no hay violencia, eso es un punto a favor", apunta Ayala.
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